lunes, 20 de octubre de 2008

me mimo contigo

desahogarse
desazón,
despavilarse
desopilante realidad,
circunstancias despolitizantes
de círculos de baba y de miel
de constricciones perfectas y afectadas
de afecciones que nos desatan
nos tañen,
besos que ahogan cuando el clamor cesa
Sede de esa absoluta justicia
y la belleza que cuelga como manojos
racimos de telas,
cosidas
de pequeñas tormentas de júbilos
de esta locura tan insana, de esta tu manía
de desbordarme y confrontarme.

el tiempo es una daga en mis manos
los confites son tan extraños,
extraño las texturas de tu cuerpo
colgando del éxtasis de gritos,

extraño por una extraña razón que extraño, pero persisto.